Aprovechando la salida de la colección de Carros de Combate de Osprey/RBA, cuya reseña podréis leer al final de este post, voy a comentar otras dos maneras de ensuciar los bajos de nuestros vehículos, alternativas a la ya comentada hace unas semanas, sobre la maqueta de un Tiger I.
Tras montar el vehículo (es recomendable no poner las ruedas para tener un mejor acceso a los bajos), independientemente de cómo lo trabajemos después, habremos de pintar los colores base. Para ello es recomendable usar un aerógrafo, tal que: base general de Dark yellow (XF-60, Tamiya) seguida de manchas lineales con Red Brown (XF-64, Tamiya) y Olive green (XF-58, Tamiya). En todos los casos, para facilitar el aplicado, la pintura se ha de disolver (agua+alcohol o thinners ya preparados) en una proporción 1:1.
Lo siguiente será darle uniformidad a todos los tonos, para lo cual empezaremos con la aplicación de sucesivas capas del filtro Tritonal camo (P242, Mig productions), esperando a que seque completamente cada capa antes de aplicar la siguiente. Tras tres o cuatro capas, pasaremos a utilizar los oleos y un disolvente (en mi caso suelo usar aguarrás inodoro de White Spirit o 502 Abteilung). De forma semejante a la descrita en el último post, pintura de edificios, aplicaremos pequeñas dosis de oleos de distintos colores por toda la superficie en cuestión. A continuación, con un pincel plano humedecido con el disolvente, vamos arrastrando y fusionando todas las manchitas, aprovechando las pinceladas para recrear chorretes de suciedad (especialmente en los bajos y laterales). A partir de este punto divergen las dos técnicas que pretendo describir, pues la aplicación de la segunda impide ver el resultado de la primera.
La primera técnica es bastante sencilla y rápida, basada de nuevo en el uso de más oleos, complementando así los aplicados previamente. En primer lugar, deberemos oscurecer los bajos con óleos marrón, negro y ocre (este último para no borrar el tono amarillento del color base). La manera de aplicarlos será exactamente idéntica a la usada previamente, es decir, tras la aplicación de multiples manchas de cada óleo, se fusionan con un pincel plano. A continuación, prepararemos unas tintas de varios tonos, por ejemplo, marrón oscuro, marrón rojizo, ocre, negro, etc. Para preparar estas tintas, se diluyen los oleos en White Spirit en una proporción 2:1. Con estas tintas iremos aplicando pinceladas en los bajos, de abajo a arriba, representando así chorretones. La dirección es fundamental: empezando por abajo la pincelada ha de terminar en la zona superior. Esto es así, debido a que cuando retiramos el pincel, la última zona en contacto queda más cargada de pintura. No importa si nos pasamos en tamaño o tono. Por último, volveremos a aplicar una capa del filtro Tritonal por toda esta superficie tratada, dando pinceladas de arriba abajo (inversas a las aplicadas anteriormente) con un pincel plano y ancho. Con esto logramos, además de unificar de nuevo los tonos, arrastrar los excesos que hayamos aplicado, pues el diluyente del filtro preparado nos permite levantar los oleos recién dados.
La segunda técnica consiste en recrear barro en los bajos del vehículo. En este caso, he aprovechado la misma maqueta para poner en práctica dicha técnica (nunca antes la había usado), de ahí que ambas técnicas sean incompatibles: si aplicamos el barro perderemos el efecto generado, a no ser que limitemos la extensión de dicho barro respetando algunas zonas.
Para recrear el barro he utilizado tres pigmentos de Mig productions: Europe dust (P028), Russian Earth (P034) y Vietnam Earth (P031), arena y un disolvente (ej. Fijador de pigmentos de Mig productions o White Spirit). El primer paso será aplicar una capa de pigmentación oscura (Russian Earth + Vietnam Earth) junto a la arena. No hace falta usar cola-blanca (a parte de ser inmiscible con el disolvente), pues la pasta generada al disolver los pigmentos será suficiente (a no ser que raspemos, claro). Una vez seco, tarda bastante, obtendremos una superficie totalmente seca y mate, propio del barro seco, con algunos “tropezones” representados por la arena que hemos usado. A continuación, vamos a detallar el barro generando el efecto de humedad en las zonas más próximas al suelo y contrastando la sequedad de las zonas superiores.
Para conseguir la humedad, preparamos una mezcla con oleo Engine grease (ABT-160, 250 Abteilung) + pigmento Russian Earth, diluyéndolo con trementina (yo he usado el fijador de pigmentos de Mig). Esta mezcla la aplicaremos en las zonas inferiores de los bajos y en la circunferencia externa de las ruedas. Cuidado de no forzar mucho las pinceladas, pues el disolvente puede levantar y arrastrar el pigmento que aplicamos previamente. Antes de que seque (tarda un par de horas), diluiremos un poco de pigmento Vietnam Earth y lo aplicamos en pequeñas cantidades en la zona intermedia de los bajos. Aprovechando que el primer pigmento aun sigue húmedo, fundiremos este nuevo pigmento en dicha zona, creando así una zona de transición. Finalmente, para aumentar el efecto de sequedad, de las zonas más alejadas del contacto con el suelo, usaremos el pigmento European dust en seco, espolvoreándolo en las zonas convenientes.
La maqueta sobre la que se ilustra este artículo pertenece a la reeditada colección de Osprey/RBA, disponible en kioscos, con la que podremos hacernos con una buena colección de maquetas finamente detallas a escala 1:35 (tanto de la segunda guerra mundial, como modernos) pertenecientes a la veterana casa italiana: Italeri, junto a una buena biblioteca de libros históricos de la archiconocida editorial de historia militar británica: Osprey Publishing, de su serie “Carros de combate”. Con un total de sesenta fascículos podremos reunir quince maquetas y sesenta libros de historia militar, un material nada desdeñable para los amantes de este hobby. Cada libro nos presenta la historia del carro en cuestión, con datos sobre su desarrollo (especialmente interesantes son los prototipos), producción y datos técnicos, todo ello acompañado de fotografías originales e ilustraciones a color (bastante útiles para elegir un camuflaje con el que pintar nuestros modelos). Además, la oferta de suscripción está bastante interesante, pues regalan el set de pinturas de Vallejo: Panzer aces, que incluye pinturas especificas para la pintura de vehículos. Podeis encontrar más información aquí.
Pues acabo de descubrir este blog y la verdad es que me ha encantado 😀 espero más entradas con muuucho interés 😀
IMPRESIONANTE BLOG, enhorabuena por este trabajo tan genial, y muchas gracias por ponerlo a disposición de patanes como yo en el pintado.