Me sentí muy afortunado cuando la gente de Wargames: Soldiers & Strategy me preguntó si podía prepararles una portada para el número que coincide con el Salute. Necesitaban una viñeta o pequeña escena con algunas miniaturas de 28mm de caballeros ítalo-normandos de Conquest Games, y me decidí por construir un diorama con varios caballeros cruzando una pradera. Ahora, me gustaría compartir con vosotros algunas cosas que he aprendido durante la construcción del mismo, aunque encontraréis más información en la revista WS&S 84. Aunque los consejos son muy simplones, creo que resulta interesante ver que no sólo existe la arenilla de modelismo que todos usamos, sino que hay otras opciones que podemos usar para nuestros wargames.
Antes de ponerme manos a la obra con la masilla y una cuchilla, cogí un poco de papel y me puse a dibujar el diseño general del diorama para determinar el tamaño de la base y la distribución de las miniaturas y otros elementos. Al final me decidí por poner cinco caballeros sobre una base circular de 15cm de diámetro. Y quise cubrir dos tercios de la misma con una praderita atravesada por una carretera; y al fondo, colocar un par de árboles de 4Ground separados por una valla de madera. Gracias a la gente de WSS fui capaz de obtener una magnifica base de madera DM de Warbases con las medidas exactas que quería y con los huecos para colocar las bases de los caballos. De hecho la idea era tener la posibilidad de poder sacar y usar las miniaturas para echar una partida; y obviamente, facilitar su transporte.
¡Ahora ya podría ponerme con la masilla! Utilicé masilla bicomponente estándar de Milliput (caja roja) para crear algunas irregularidades en el terreno. Di forma a la carretera mediante dos elevaciones a ambos lados y una pequeña elevación en el centro de la misma (sería la zona no apisonada por los carromatos). La elevación de la parte posterior sería más alta para asegurar una buena base para la valla. Si nunca has usado este tipo de masilla, es recomendable utilizar un poco de agua para darle forma. Sin embargo, no es necesario añadirla cuando mezclas los dos componentes ya que lo que conseguirás es que se te empiece a disgregar entre los dedos; si bien es recomendable si vas a tenerla mucho tiempo sin utilizar para ralentizar su secado. Para construir la valla simplemente utilicé cerillas y un poco de cola blanca. A decir verdad, desconozco si el estilo de vaya que construí aparecería en Italia por aquellas fechas. Pero yo no lo conocía hasta que llegué a Finlandia, y me encantó. Básicamente hundí tres pares de cerillas a distancias regulares y después empecé a apilar diagonalmente más cerillas de forma que quedaran entre cada par vertical, tal y como podéis ver en la foto.
Tras esperar toda la noche para que secará bien la masilla, apliqué una buena capa de barniz negro con el aerógrafo y un bote de Surface Primer de AMMO. Recuerda, las imprimaciones no debes diluirlas.
Inmediatamente empecé a pintar el terreno. Con un marrón medio aerografié toda la base. No importa demasiado el color que se use, ya que simplemente quería cubrir el color negro con un tono más próximo a la tierra del camino. Por otro lado, pinté la valla de madera utilizando diferentes tonos grises. Aproveché que tenía encima de la mesa el set de AMMO para el color Dunkelgrau y utilicé: Dunkelgrau (A.MIG-008), Dunkelgrau light base (A.MIG-909) y Dunkelgrau high light (A.MIG-910). No obstante, siempre podéis partir de un color gris oscuro y aclararlo con blanco. Además, apliqué una capa muy diluida de color marrón por algunas zonas de la valla para crear algo de contraste.
En lugar de utilizar arena de modelismo o de playa –los recursos que más usamos los wargamers-, directamente utilicé arena real. Y por arena real me refiero a que en realidad las dos primeras son más bien gravillas, mientras que lo que he usado aquí es más próximo al polvo. Ya he explicado como obtuve y preparé esta arena en este post. El resultado es muy atractivo ya que aunque es como polvo, siempre hay pequeñas piedrecitas y aglomerados que confieren una textura irregular. Primero apliqué una capa de cola blanca diluida con agua y luego empecé a espolvorear la arenilla. Sin embargo, me di cuenta de que esto no era suficiente ya que me llevaba parte con el dedo cuando lo pasaba, una vez de seca la cola blanca. Y por ello apliqué una segunda capa de pegamento, esta vez utilizando el producto de AMMO Sand & Gravel. Y quedó perfecto. Para aplicar este producto utilicé un pincel y deje caer gotitas, sin llegar a encharcar mucho la superficie; y más importantemente, sin tocarla. Si tocas la superficie con el pincel, 1) manchas el pincel y te toca limpiarlo y 2) puedes destrozar la textura. Después lo dejé secar toda la noche. Además, añadí algunas piedras más grandes con cola blanca para meter un poco más de variedad.
Al día siguiente añadí un poco más de color al suelo con el aerógrafo. No cubrí completamente el color de la arena, si no que utilicé pinturas muy diluidas (no tanto como un filtro, sino algo como 3 gotas de disolvente por cada gota de pintura). Utilicé un color amarillento, por ejemplo Amarillo oscuro (Tamiya XF-60), sobre la carretera; mientras que utilicé uno verdáceo (Verde Oliva, Tamiya XF-58) para el resto de la base. Por supuesto intenté no pintar la valla que ya estaba pintada de gris! También pinté las piedras grandes con un pincel y pintura gris diluida, y después apliqué un pincel seco con blanco.
La madera no siempre tiene el mismo color, muchas veces incluso cuando viene del mismo árbol. Pero sobre todo, por el paso del tiempo. Por lo tanto, vamos a aplicar algunas notas de color con filtros. Ya he explicado varias veces en el blog como que es un filtro; pero por si acaso, un filtro es pintura muy diluida (1:10) por lo que apenas cubre, pero permite cambiar ligeramente el tono de la superficie. Échale un ojo a este post si deseas saber más. AMMO tiene una gran cantidad de filtros listos para utilizar, evitándonos tener que preparar mezclas. Por lo tanto, seleccioné cuatro de estos filtros de tonos diferentes: rojizo, amarillo, verde y azul; y empecé a pintar diferentes listones de diferentes colores. Recuerda, cuando apliques un filtro debes descargar la mayor parte de la pintura primero sobre un papel (no es una tinta!).
Finalmente, solo quedan las plantas. Junto a los dos árboles grandes que coloqué en la parte trasera, quería recrear una auténtica atmosfera primaveral. Debe ser que aquí en Finlandia aún sigo esperándola…y eso que estamos ya casi en Mayo. Para conseguirlo me lancé a utilizar productos diferentes para crear muchos contrastes y texturas. Primero, apliqué de forma aleatoria un poco de serrín verde muy fino, pegado con cola blanca. Con eso de “forma aleatoria” me refiero a que no cubrí completamente la superficie, si no que dejaba muchos claros de arena. Esto crea un contraste muy interesante. Encima de esta capa, empecé a pegar “grass tufts” o arbustitos de diferentes formas y colores. Esto es muy importante para conseguir un efecto realista. No debemos usar siempre arbustitos del mismo color y forma, si no combinarlos. Por ejemplo, yo he usado aquí cuatro referencias mayormente de Tajima1. A continuación, use otro par de productos para añadir nuevas texturas. Uno es la típica esponjita verde tan común en el modelismo ferroviario. Y el otro es algún tipo de liquen de plástico, también de modelismo ferroviario. Una vez más, le quité a mi padre estos productos y no sé las referencias. Pero es justo el mismo material que usa 4Ground en sus árboles. En todo caso, estoy seguro que Bosch y otras marcas similares lo tienen. Finalmente, me encanta la enredadera de Army Painter (poison ivy), así que puse un poco sobre la valla. Me encanta el efecto!
Para acabar, si quieres saber más sobre como hice la viñeta y como pinté los caballeros y sus caballos, te recomiendo que le eches un ojo al número Wargames: Soldiers & Strategy 84; donde además podrás encontrar otros tantos artículos de wargames que seguro te interesarán.
From one WS&S contributor to another…..
Great work.
Tony