Aprovechando un nuevo proyecto temático en el que estoy trabajando, voy a intentar explicar cómo pintar cómodamente los paneles superiores de las míticas casas de madera del Lejano Oeste americano. Como detalle histórico, me gustaría mencionar que los españoles estuvimos viviendo ese Old West tres siglos antes que los americanos, a pesar de tanto producto Hollywoodiense y su mítica “conquista del oeste”. Echar un ojo, por ejemplo, a los Dragones de cuera.
Las casas que uso para ilustrar este tutorial las compré por ebay, son de madera y los detalles y cortes están hechos con laser, con lo que la calidad es de suponer. Al estar hechas de madera se hace innecesaria la pintura, a excepción de la parte superior, que solían estar pintadas y rotuladas. En este punto es donde entra el tutorial.
Para empezar, como nos interesa conservar el color inicial no vamos a pintar nada a excepción de la parte superior. Para no estropear el resto de la pieza vamos a enmascararla. Para ello, yo uso cinta de carrocero, típica de los pintores, que se puede encontrar en cualquier tienda de chinos. No obstante, algunas marcas comerciales, como Tamiya, nos venden una específica de modelismo, pero obviamente bastante más cara. Con esto, cortamos varias tiras de la cinta de carrocero y vamos cubriendo toda la pieza, a excepción de la zona de interés. En este caso, la parte que quiero pintar está rodeada por un recuadro o marco, lo que me obliga a cubrir con la cinta los flancos del marco, ya que SOLO quiero que quede pintado el fondo.
Una vez esté todo el conjunto correctamente enmascarado procederemos con la pintura con ayuda de un aerógrafo y pinturas apropiadas, que en mi caso todas son de Model Air, Vallejo. Aunque este tutorial solo ilustra dos colores, el blanco y el verde, la idea a seguir sería la misma para todos los casos, independientemente del color: oscurecer los flancos, dejando la parte central más iluminada o del color original, ganando así profundidad y realismo (al darle un toque de envejecimiento o efecto de polvo). Siguiendo estas pautas, en el caso del blanco he seguido este protocolo: capa inicial con una mezcla de Blanco (001) y Amarillo arena (034) a partes iguales, tras lo cual con Blanco puro se rocía exclusivamente la parte interna, respetando los lados. A continuación, para agudizar el degradado en los extremos se aplica una primera capa con Amarillo arena puro, seguida de una de Tierra oscura (029), esta vez, limitada exclusivamente a los bordes. En el caso del verde, la capa inicial será con Verde oliva (007), seguida de una subida añadiendo Amarillo (002) en una proporción 1:2, aplicando esta iluminación en la parte central. De manera análoga, para remarcar los extremos se aplica una primera rociada con Tierra oscura y una segunda con Negro mate (057).
Una vez hemos terminado, podemos despegar con sumo cuidado la cinta de carrocero. Personalmente, esta parte me encanta :D. Si cuando retiramos la cinta observamos que ha quedado un cerco o marca sin pintar, no hay problema, ya que con un pincel y con la pintura adecuada lo cubrimos sin complicaciones, sin comprometer el degradado conseguido con el aerógrafo. Una de las grandes ventajas que tienen los modelos que ilustran el tutorial es que no es necesario remarcar las sombras de los tablones, ya que el detalle es lo suficientemente profundo como para que la pintura aplicada no lo cubra, ahorrándonos un trabajo tedioso.
Tras esto, viene la parte complicada: los rótulos. En mi caso, a pesar de tener la línea de los tablones como guía, he cedido enmascarar y dejar el recuadro central donde se situará el rotulo, facilitándome así la perspectiva a la hora de rellenarlo (hacer las letras con el tamaño y la distancia intermedia adecuada es bastante complejo, de hecho, a mi me ha salido un poco rana). Una vez enmascarado, empezaremos a pintar los rótulos con la pintura bastante diluida. En mi caso, he usado pinturas de Model air directamente sin diluir, ya que la textura es más que adecuada. Así, partiremos creando el esqueleto o esbozo de cada letra, y finalmente, del rotulo entero. Esto nos permite tener una vista general de cómo quedará, aparte de poder jugar a posteriori con los grosores para conseguir las distancias óptimas. Si por el contrario, fuésemos haciendo poco a poco cada letra, posiblemente al llegar a las últimas nos encontremos con falta de espacio y el resultado sería bastante mediocre.
Una vez completado dicho esbozo, empezaremos a darle grosor a cada letra. En mi caso, para tener una referencia he abierto un Word y escrito los rótulos que pensaba poner (Bank y Sheriff) en fuente Algerian y lo he imprimido para tenerlo de referencia. Si por un casual una recta nos sale ondulada, o nos pasamos en algún punto, podemos repasarlo tranquilamente. Eso sí, esta vez la pintura tendrá que estar menos diluida para que cubra correctamente. Finalmente, cuando terminemos los rótulos quitamos cuidadosamente la cinta.
En mi caso, no he hecho nada más, aunque había pensado aplicar un par de capas de filtros con oleos para homogeneizar toda la pancarta. No obstante, finalmente lo descarte por miedo a estropear el degradado conseguido con el aerógrafo.
Hola
excelente tu blog, estaba buscando ideas para pintar madera y vine a dar al tuyo. Veo que te interesan varios temas, ver que existe gente asi me da animos ya que me preocupaba pensar que yo era muy disperso… jajajaja!
Es muy interesante el enfasis que haces en el blog con entradas dedicadas solo al asunto «pintura» que es creo yo la clave en modelismo.
Me anoto como un seguidor mas.
Excelente trabalho Rubén Torregrosa, estou procurando maneiras de pintar letras com tinta acrílica sobre um substrato acrílico com pincel, mas até agora não obtive resultados satisfatórios. Vou tentar sua técnica utilizada no letreiro.